Jopen Brouwerij, un ‘templo’ de la cerveza

Jopen BrouwerijEl día previo al viaje a Gouda y por supuesto al mogollón del Borefts nos pegamos un homenaje visitando una de las fábricas mas bonitas que hemos visto hasta ahora (por no decir la más bonita) en compañía de Manuela, Benjamín y Gonzalo (Humulus Lúpulus). La fábrica de Jopen no se encuentra exactamente en Amsterdam está en Haarlem, a 20 minutos.en tren.

Haarlem es sinónimo de cerveza, durante muchos siglos fue uno de los centros de actividad cervecera más importante de los Países Bajos. Tan importante era esta bebida para la ciudad que las recetas de todas las fábricas, eran supervisadas por Ayuntamiento garantizando así la calidad. Os recuerdo que eran tiempos en los que el lúpulo no estaba de moda, no se usaba ni para aromatizar ni conservar, siendo una mezcla de hierbas, denominada Gruit, la que hacía las veces de lúpulo. Las cervezas Gruitbier de Haarlem eran conocidas en gran parte de Europa. Para que veáis hasta donde llegó su fama, una de ellas, la Haarlemse Kyot, fue la cerveza mas popular de Amberes durante el siglo XV.

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Borefts Beer Festival (I). Recorriendo Amsterdam

amsterdam de cervezasEl último fin de semana de septiembre se celebró en la localidad holandesa de Bodegraven el Borefts Beer Festival (realmente el BBF original, todo hay que decirlo) organizado por la cervecera De Molen. Este es un evento de talla internacional que congrega a muchas de las mejores cerveceras del mundo, salvo Medina, tengo que decirlo porque sino me matan Jesús y Almudena, 😉 un beso a los dos.

Pero antes de hablar del evento, que es una pasada, nos gustaría hablar un poco sobre los días previos que pasamos en Amsterdam centrándonos en los lugares que pudimos visitar.

La ciudad está claramente dominada, en cuanto a cervezas se dice,  por Heineken y muy de cerca por Amstel, no el río sino la cerveza. Pero una de las cosas que se puede hacer en Amsterdam además de perseguir el dragón, buscar a los enanitos o encender una luz roja es beber muy buena cerveza, artesanal sobre todo.

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Belgian Beer Weekend (2013) II. Organización del Evento y primer día

Aqui viene la segunda parte del post con casi un año de retraso… Esta vez nos hemos superado!

El sábado madrugamos para poder hacernos con una buena bolsa de chapas, así que café en mano y el bolsillo lleno de dinerito nos pusimos en la cola de una de las 3 ó 4 cabinas de venta de chapas. Podéis imaginaros que a pesar de ser las 10 de la mañana la cola ya era estilo Nacho Vidal.

Chapa del Belgian Beer WeekendComo ya introdujimos en el primer post dedicado al evento, BBW I, esta feria es conocida en el mundo entero por ser uno de los eventos más importantes del mundo dedicado a la cerveza belga. Está organizado por la Federación de Productores Cerveceros Belgas (Federation of Belgian Brewers) cuyos miembros tienen por objeto la protección y divulgación tanto de la cerveza como del estilo belga. Este año se congregaban en el evento 51 productores belgas, se echó de menos alguno de los productores mas de moda como Struise. Fue agradable y un placer el espectáculo que las diferentes logias cerveceras daban en cada momento. Si sumamos las diferentes cervezas de los productores asistentes se ofrecían un total de unas 350 referencias de estilos tan clásicos belgas como Lambicas, Rojas Flamencas, Witbier, Abadía, Trapenses, y muchas más.

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Belgian Beer Weekend (2013) Parte I. Paseando por la capital de la cerveza

Belgian Beer WeekendHace ya tiempo que tenemos pendiente este post, dedicado a la capital de la cerveza y uno de los eventos más importantes que alberga Bruselas, el Belgian Beer Weekend. Este evento se celebra desde hace 15 años la primera semana de septiembre, en esta ocasión, los días 6, 7 y 8 fueron los elegidos para dar rienda suelta a una orgía de lúpulo y cebada.

El viernes, por temas laborales, llegamos tarde y no pudimos unirnos a la fiesta, desafortunadamente la venta de chapas se había terminado, pero bueno si algo tiene Bruselas es que hay mucho que descubrir y para un amante de la cerveza siempre hay un rincón nuevo. Una visita obligada son las tiendas de cervezas que se encuentran desperdigadas en las inmediaciones de la Grand Place. Sigue leyendo

De Cervejas en Lisboa

Esta semana Santa (si vale hace ya un tiempo… pero bueno ya sabéis que siempre vamos con retraso) aprovechamos para escaparnos unos días a la capital de nuestro vecino país Portugal. Al contrario que en otras ocasiones no esperábamos encontrarnos grandes cosas en lo que a panorama cervecero se refiere, puesto que habíamos estado buscando por Internet y no habíamos visto ninguna fábrica ni mucho movimiento cervecero.

Pero, no nos engañemos, la esperanza es lo último que se pierde, así que en el fondo de nuestros corazoncitos esperábamos encontrar algo interesante aunque fuera perdido en algún rinconcito lisboeta.

Cervejeria TrindadeAsí que desde el primer día intentamos ver lo que nos ofrecía Lisboa. Tras un día visitando el centro histórico nos fuimos a cenar a un sitio bastante conocido tanto por lisboetas como por turistas, la cervejaria Trindade (Rua Nova da Trindade 20).

Es la “cervecería” más antigua que sigue en funcionamiento en Portugal. Fue inaugurada ni más ni menos que por un gallego, Manuel Moreira García, en 1836 en un antiguo convento (convento da Trindade). Está situada en el barrio Baixa-Chiado, uno de los más típicos de Lisboa. El sitio merece una visita por su interior, completamente decorado con azulejos y bastante pintoresco. Eso sí, aunque tiene una larga historia como fábrica de cerveza, no Cervejeria trindadeesperéis encontraros cerveza artesana, casi un siglo después de su inicio, en 1934 la cervecería pasó a formar parte de un consorcio cervecero y un año después cerró su actividad como fábrica. ¿En qué se traduce esto? En que en la actualidad, si cenáis en Trindade, podréis beber (como en todos lados de Portugal) diferentes cervezas de Sagres y Super Bock.

Entonces, ¿merece la pena la visita? Pues depende de lo que busquéis, si lo que queréis es beber cerveza artesana, o buscáis un brew-pub o algo así… entonces podéis pasar de largo. Sin embargo, la verdad es que el sitio tiene historia, y aunque para estar en Portugal no es barato, tampoco os dejareis un riñón, y no se come mal. Nuestra recomendación, acercaros a hacer una visita, es bastante bonito, y tampoco está de más aunque sea imaginar lo que fue en su día. Eso sí, suele haber bastante cola, nosotros tuvimos suerte, pero si veis que va para largo… ahí ya plantearos si realmente es necesaria la espera.

Aprovechamos para comentaros, si vais a visitar Lisboa, no os dejéis llevar por el nombre de “Cervejaria”, lo veréis por todos sitios, pero no esperéis grandes bares cerveceros, realmente, las cervejarias (o por lo menos todas las que nosotros pisamos) vienen a ser marisquerías, o restaurantes sin más, visitamos varios y no encontramos ninguna Cervejaria que nos ofreciera otra cosa.Sagres Bohemia

Al día siguiente aprovechamos la tarde para ir al único sitio que habíamos encontrado relacionado íntimamente con cerveza artesana en Lisboa: “A loja da cerveja caseira”, básicamente por lo que habíamos visto se trataba de una tienda para home brewers, donde podías encontrar los kits básicos de elaboración y bueno, ya sabéis todo lo relacionado con este mundillo. Una semana antes de nuestro viaje habíamos podido consultar su web y los precios eran bastante más bajos que en España, así que esperábamos venirnos a casita con un Kit de elaboración. Desgraciadamente, desde el hotel intentamos volver a consultar su página varias veces pero parecía no funcionar, cosas de la informática pensamos… el servidor estará caído…  Así que sin importar el tiempo que hacía, llovía, y mucho y sin tener muy claro cómo llegar al sitio… nos dirigimos hacia el barrio de Benfica. Unos 20 o 25 minutos después y calados hasta los huesos llegamos a la calle en cuestión… y lo que nos encontramos terminó de chafarnos nuestras esperanzas en lo que a materia cervecera se refería, el local estaba en alquiler y no quedaba ni rastro de lo que había sido. (Pues va a ser que la página estaba ya caída por algo). Si veis referencias a este sitio por Internet (que todavía hay varias) ya os avisamos, parece que el negocio está más que cerrado así que no perdáis el tiempo en daros el paseo.

Taberna Da Rua Das FloresTristes y alicaídos nos volvimos al hotel a ver si nos secábamos un poco, y bueno, planificando lo que ya pensábamos sería nuestro último intento por encontrar una cerveza artesana. En nuestra búsqueda por Internet habíamos encontrado una referencia a un restaurante que recomendaban bastante y habíamos visto en una foto que tenían Sovina. El restaurante en cuestión se llama “Taberna da Rua das Flores” y se encuentra en la Rua Flores 103, al lado de la Plaza Luis Çamoes. Mucho ojo si os dejáis caer por allí, no vayáis a saltaros la entrada que es la puerta de una Mercería.  El lugar, es un sitio muy pequeñito con 6 o 7 mesas nada más y no se puede reservar. Cuando llegamos eran las 22:30h y todas las mesas estaban ocupadas, y  había un par de personas esperando a una mesa que ya se vaciaba, así que nos Cerveja Sovinainformaron si queríamos podíamos esperar un tiempo o cenar en las escaleras… ¿en las escaleras??! Si, en las escaleras que tenían acondicionadas en un rinconcito con unos cojines y unas cajas de madera a modo de mesa, así que dijimos ¿Y por qué no? Puede tener su encanto, y sí, lo tenía, además hemos de decir que estuvimos comodísimos.  Sin duda, este sitio fue lo mejor de nuestra visita a Lisboa, André Magalahes, el propietario, es un tío encantador, y que se ve que tiene bastante mundo. Nos contó que lo normal es compartir dos o tres platos, como si se tratase de raciones, y nos explicó en detalle cada uno de los platos de la carta, bueno, carta no había, una pizarra que hacía las veces de ella. Los platos la verdad que sorprenden, hígados, sesos, pescado, vieiras… jejeje, bueno un poco de todo, pero que al principio suena raro, eso sí los que probamos estaban impresionantes. Como no teníamos muy claro qué pedir elegimos un plato y le dijimos que nos trajera él lo que viera.  El resultado… impresionante, todo estaba riquísimo y el precio está muy bien, para nada excesivo.

Taberna da rua das floresAh!!! Bueno, y se me olvidaba… me gustó tanto el sitio que me pongo a hablar y se me olvida el tema al que íbamos… la buscada Sovina… ¿La encontramos? Siiii, efectivamente, tenían Sovina, así que pudimos bañar la exquisita comida, con nuestra primera cerveza artesana en Lisboa. En concreto, pudimos probar la Sovina Ambar (cogimos una botella de 75cl para los dos) y la Sovina Bock. Esta vez sí, nos fuimos de vuelta al hotel con una grandísima sonrisa en nuestras caras. Sobre la cerveza… la verdad es que en ese momento nos supo excelente ya llevábamos demasiadas Sagres y Super Bock en el cuerpo y se agradecía algo diferente. Si bien, más adelante nos surgió la duda de si era normal que no tuvieran nada, nada de espuma.

Cervejaria PortugaliaA la vuelta de nuestro viaje a Cascais vimos cerca de la estación de tren (Cais de Sodre) la también conocida cervejaria Portugalia. Ya la habíamos visto por Internet, y sabíamos que tampoco tenía cerveza propia, y que la carta se reducía a más Sagres y Super Bock, pero aun así decidimos ir para allá. Al menos nos pudimos sacar alguna foto con un alambique muy gracioso que tienen en el exterior del edificio. La historia de Portugalia también se remonta bastante atrás en el tiempo, a 1925, y está unida, como en el caso de Trindade, a la historia de la cerveza en Portugal. Básicamente, esa historia (quizás algún día nos animemos a escribir algo más al respecto) se puede resumir en que hace años proliferaron diferentes cervezas artesanas en Portugal, que al final fueron absorbidas por las grandes compañías, terminando con el mercado artesano, que a un ritmo más lento que en España parece que empieza a intentar renacer.

Una de las cosas más típicas de Lisboa es ir a visitar Belem, la verdad es que es muy bonito. Y una vez allí, no puedes volver al centro sin comer uno de los famosos pasteles de Belem, deliciosos. El sitio más conocido es “Pastéis de Belem” en la Rua de Belem. Merece la pena sin duda. Sin embargo a escasos 10 metros, tan solo cruzando la calle, en la acera de en frente, existen otras pastelerías que venden, los mucho menos conocidos, pasteles de cerveza, sobra decir, que teníamos que probarlos! También estaban riquísimos, encontrar el sabor a cerveza, eso sí, es complicadillo. Pero en fin, son pasteles de cerveza y con eso nos conformamos! Seguro que si visitáis Lisboa vais a Belem, y a probar los famosos pasteles, ya puestos no olvidéis cruzar la calle y probar también los de cerveza!

Pasteles de cerveza

Museu da CervejaPor último, en lo que a cerveza se refiere, justo en pleno centro podréis encontrar el “Museo da Cerveja” en plena Plaza del Comercio, durante los días que pasamos allí lo habíamos visto, pero siempre que llegábamos estaba cerrado, y como al final no habíamos encontrado casi nada de cerveza artesana tampoco pensamos que hubiera gran cosa. Pero el ultimo día sin quererlo lo encontramos abierto, así que ya que estábamos allí… El sitio es enorme, muy orientado como restaurante para poder comer y cenar. En la planta de arriba tienen lo que llaman el museo de la cerveza, la entrada a dicho museo cuesta 3 euros. No veréis gran cosa la verdad, y todo relativo a cerveza Museu da Cervejaportuguesa (y colonias) pero a los coleccionistas como nosotros, nos gusta ver cervezas antiguas, botellas curiosas, y demás, esas típicas cosas que te ponen los dientes largos porque te gustaría tener un día una buena colección. A la salida del museo, que es pequeñín, hay una especie de sala, que intenta representar como los monjes elaboraban la cerveza en su día.  Además te daban un vasito (de barro o cerámica) para catar una cerveza, y el vaso te lo quedabas de regalo.

A parte del museo de la parte superior, como os contábamos la parte de abajo es como un gran bar-restaurante. En la carta podréis encontrar varias referencias de cervezas de Portugal y de  sus colonias (Cabo Verde, Madeira, Angola…), y por fin, pudimos ver de nuevo cervezas artesanas! Contaban con las Sovina, Rolls Beer, y Vadia. Eso sí, a excepción de la Sovina, los precios resultaban muy elevados (desde 10€ la Vadia Ruiva de 50 cl a 22,50€ la Rolls Beer Nectar de 75cl).

Museo de la cerveza

En fin chicos, esto es todo amigossss. Encontramos menos de lo que queríamos pero más de lo que esperábamos. Si queremos comentar que el panorama parece que empieza a cambiar, fuera de Lisboa parece más sencillo encontrar cerveza artesana, pero no dudamos que el movimiento llegará pronto a la capital lisboeta, así que seguro que cuando vayáis tenéis más suerte que nosotros.

Birro Turismo en Roma (II)

Nuestro segundo día en Roma fue duro, para que engañarnos, empezamos el día con algo de sed y no sólo de cerveza. La planificación consistía en un paseo por el centro de Roma, visita al Panteón, Fontana di Trevi, Piazza Espagna y terminar de aprovechar la RomaPass entrando en el fabuloso Castel Sant Angelo, que si no lo habéis visto por dentro merece mucho la pena, sobre todo ver desde lo alto el anochecer de la ciudad eterna con el marco incomparable de la Ciudad del Vaticano.

Open Baladin RomaPero como lo que nos gusta es la birra, y la italiana no está nada mal, el objetivo de la noche era pasar un buen rato en el Open Baladin. Este local se encuentra en la Via Degli Specchi 6, zona Campo dei fiori, fácil de llegar  y muy cerquita de una pizzeria que os recomendamos, Renato e Luisa, pizza al corte al más puro estilo italiano nada de chufas para turistas y muy del gusto y tradición del romano (Via Dei Barberi 25).

Antes de entrar en detalle de nuestro paso por el local, nos gustaría charlar sobre Le Baladin y su creador, Teo Musso, que obviamente tiene mucho que ver con el local.

El Birrificio Le Baladin nace en 1996 en la localidad italiana Piozzo de la mano de Teo Musso, de sobraColaboracion Sam, Teo y Leo conocido en el mundillo y más por su participación en BrewMaster junto con Sam Calagione (DogFish Head) y Leonardo di Vincenzo (Birra del Borgo). Comentar que de esta unión experimental, ha nacido la Birra Etrusca, si alguien ha tenido la suerte de probarla que lo comente please. La receta se basa en antigua cerveza encontrada en vasijas etruscas de 2800 años y tras una rocambolesca combinación de avena, trigo italiano, cebada malteada de dos hileras y unas cuantas cosas más cada uno de los tres participantes en este delirio decidió fermentar de una manera distinta. La versión americana, fermentada en bronce, salió al mercado en diciembre 2012 con el nombre Dogfish Head Etrusca Bronze.  Baladin, fermentó en barrica de madera dando como resultado la Baladin Etrusca, y Birra del Borgo, lo hizo en vasijas de terracota, no tenemos noticias de que comercializarán su birra.

Pero bueno centrémonos en Baladin que es lo que nos interesa en este caso. Le Baladin es un término francés que significa El Bufón Ambulante o Juglar, Musso pensó que sería adecuado ya que la gente de Piozzo se mueve mucho entre Francia e Italia y el propio Musso se ha movido por las mejores fábricas de Europa formándose como cervecero. Musso sin lugar a dudas es un personaje excéntrico considerado uno de los precursores de la cerveza artesana en Italia, cervecero experimental y genio transgresor en algunas de sus creaciones como veremos más adelante. ¿Por qué decimos que es un personaje excéntrico?, Entre otras cosas, ¿qué pensarías si te decimos que al tomar alguna Baladin puede ser que estés tomando una cerveza fermentada con ayuda de las ondas musicales?, pues Musso cree que conectando auriculares directamente a las cubas de fermentación y transmitiendo las buenas vibraciones de la música en diferentes fases de la fermentación, se ayuda a la levadura, como organismo vivo, a realizar su trabajo mejor o de manera distinta. Como curiosidad creo que tienen composiciones particulares para cada una de las fases de la fermentación.

Otro de los datos curiosos es que el 85 % de sus cervezas están embotelladas, ¿por qué?, pues esto tiene dos razones de peso, la primera es que Italia es una región de vinos, siendo la zona del Piozzo referente vinícola, con lo que Musso toma mucho de esta cultura y la segunda es la personalización de la  imagen de marca, se vende el contenido y el continente. Si sumamos estas dos cosas  tenemos como mercado los restaurantes más chic de Italia que  incorporan a sus cartas las cervezas Baladin y como un buen vino es presentado por el sommelier en su botella, las cervezas, según Musso, deben seguir una presentación similar.

En cuanto a la elaboración, Musso, además de  la malta y lúpulos regulares, suele incorporar a la maceración ingredientes cómo la mirra, el chocolate, café, diferentes especias y una larga lista, que se encuentran con las levaduras de alta fermentación que suelen provenir de cepas de Whisky o Vino.

Y ahora ya, después de un poco de cultura general sobre Baladin, vamos al bar, lugar, que os recomendamos que visitéis si pasáis por Roma, realmente merece la pena, algo que podréis ver por vosotros mismos nada más entrar en el bar.

Open BaladinEl Open Baladin es una Restaurante/Cerveceria del Grupo Baladin que ya cuenta con varios establecimientos. Si queréis estar en la sala principal, con la maravillosa vista de todas las cervezas expuestas se recomienda reservar. En esta sala, podréis ver una gran pizarra con las diferentes cervezas que podéis tomar, un montón de mesas  y una decoración moderna, con algún graffiti por las paredes. Una larga barra muestra más de cuarenta grifos con cervezas en su mayoría italianas, pero se puede encontrar desde Dogfish head, belgas, y otras curiosidades. Tras la barra podemos ver una estantería que cuelga del techo con una gran colección de diferentes botellas, llenas y vacías iluminadas con tenues leds, sin duda una de las imágenes más característica del Baladin. Aparte de esta sala el Baladin cuenta con más zonas donde poder cenar tranquilamente, también con decoraciones curiosas pero sin lugar a dudas lo mejor es estar en la sala inicial.

Sobre el  precio, todas las cervezas de barril cuestan lo mismo, 5 €, y el volumen viene a ser prácticamente el de una pinta, salvo cervezas especiales como la Xiauyu que son 10 cl.

Pizarra open baladin

Nosotros optamos por sentarnos en la barra, donde cenamos y nos tomamos unas cuantas cervezas.

Revisando la carta, y la pizarra de cervezas nos decidimos por tomarnos, para abrir boca, una Bastarda Rossa de Birrificio Amiata, una Belgian Ale de 6.5 %, elaborada con castañas y una Baladin Blonde, 4.9 %, otra Belgian Ale, sin demasiados puntos a destacar pero bastante ricas para empezar. Después de esto y mientras nos decidíamos por la comida, nos recomendaron tomar una Baladin Super 9º, 9 %, una Belgian Strong Ale, probablemente la cerveza más consumida en Open Baladin y su estrella. Viene de una receta antigua de finales del siglo IX, como nos contaron, estilo belga de abadía próxima a una triple. Pero lo característico es que en la fermentación en la cuba se utiliza una cepa de levadura inglesa y una vez embotellada fermenta por segunda vez, durante dos meses con una cepa de levadura belga. Es una cerveza de color ámbar oscuro, muy poco turbia, en nariz se perciben aromas a flores, albaricoque, almendra y plátano. Baladin BlondeEn boca queda muy marcada la malta, el albaricoque y las flores, de trago largo seco y con un gusto picante al final. Mientras tomábamos esta cerveza pedimos una buena hamburguesa de pollo para llenar la tripa para lo que se nos venía encima, una Xiauyu 2009 de 13.5 %, 10 cl de cerveza que te llenan la boca totalmente. Seguramente sea la joya de Baladin, Musso ha dedicado a esta cerveza un proceso competo, oxidación técnica, que implica que incorpora oxígeno al envejecimiento de 18 meses de esta Barley Wine con cierto parecido a una Lambica. Este proceso es más típico de los vinos de oporto o jerez, que de la cerveza. ¿Y qué da como resultado esto?, pues una cerveza oscura, color madera sin espuma, carbonatación y burbuja. En la nariz recuerda a un oporto, y en boca se nota mucho la madera, el típico sabor del oporto, muy denso y dulce con una presencia del alcohol clara. Extremadamente dulce y muy alcohólica, así que después de unas cuantas birras esos 10 cl dan mucho de sí.

Una vez saciada la sed, y algo perjudicados, jejeje, queríamos comprar alguna cerveza para llevarnos a casa, porque obviamente, Open Baladin ofrece la venta de botellas de Le Baladin, dificil decidirnos, tantas cervezas, buenas cervezas, y al mismo tiempo tan bonitas… al final, nos trajimos  la Nazionale 2012, cerveza elaborada con lúpulo italiano de la cosecha del 2012.

Domus BirraeEl tercer día era el día de nuestra vuelta, así que la mañana se centraba en pasear por las cercanías del Coliseo, y pasarnos a comprar alguna birrita en el Domus Birrae. Esta tienda se encuentra en la Via Cavour 88, cerquita de la estación de Termini. Como ya comentamos en el primer post dedicado al viaje, es parte del grupo de Birra del Borgo, y cuenta con una gran cantidad de referencias artesanas italianas, belgas, americanas y demás. En cuanto a referencias españolas sólo podemos decir que vimos la Janis Porter de Naparbier y la “En el Bosque” de Nómadas en colaboración con omnipollo. En el local se hacen multitud de catas, es punto de abastecimiento de materias primas de Homebrewers, con lo que podréis ver las estanterías repletas de cebadas malteadas, lúpulos, kits, y demás instrumental. El dependiente, de cuyo nombre no nos acordamos, nos recomendó una serie de cervezas y nos habló de la Dude, que tendremos que probar.

Y como resultado de nuestra visita, y dadas las limitaciones de la maleta ;( nos trajimos estos recuerdos:

Birras ItalianasDe ExtraOmnes Kerst Reserva 2012

De LoverBeer una D’uvaBeer 2010,

De Menareta La Vergüenza Double IPA,

De Birra del convento Carrobiolo:  la O.G 1111 ,y la O.g 1085 pedro fontene

En fin, esperamos que este post os haya transmitido un poquito de Roma, o al menos os haya dado alguna idea para una futura visita a Italia!

BirroTurismo en Roma (I)

Cuando uno habla de Roma es inevitable no pensar en dos cosas por un lado en toda su historia (sede del Vaticano, ciudad eterna, el Coliseo, el Foro, el Panteón y una larga lista de monumentos imprescindibles) y por otro lado su riquísima comida la pasta, la pizza y la comida italiana, que nos puede.

Peeero en todo viaje, tras pasar el día recorriendo la ciudad, pateando y ejerciendo como buenos “guiris” hay que saber encontrar un hueco para relajarse, disfrutar aún más y como no… tomarse unas buenas birras. Así que no dudamos en, dentro del poco tiempo que teníamos, intentar también conocer un poco más el movimiento cervecero italiano que tanto está dando que hablar.

Si preguntamos a diferentes personas por que cerveza italiana conoce el 90% dirán, casi con toda seguridad, la Birra Moretti, la Peroni y alguna otra cerveza industrial que básicamente acompañan a un plato de pasta o pizza en un bar de turistas. Pero el movimiento artesano italiano lleva dando guerra desde los 90 con la aparición de los primeros “birrificios” y la acertada idea de asociase al movimiento incipiente de la “Comida Lenta” que mueve a la juventud romana.

Italia cuenta con unas 150 micros, cuyo denominador común es intentar acercarse a los productores locales para conseguir que sus productos sean lo más autóctonos posibles. Este movimiento cervecero dio lugar en 1998 a la creación de un sindicato de cerveceros UnionBirrai que pone de manifiesto el orgullo por sus cervezas y sus cerveceros y da como fruto algunas de la ales artesanas más inventivas del momento además demuestra un buen rollo general entre los cerveceros y un objetivo común: La Birra.Ma Che Siete Venuti a Fá

Pero bueno, no nos liemos con la historia italiana, y vamos a lo que interesa, los sitios que pudimos conocer ese fin de semana. Nuestro primer destino, tras todo el día visitando la Roma antigua, fue un barecito llamado “Ma ‘Che Siete Vinuti A Fà”, conocido entre otras cosas por ser considerado por RateBeer como el mejor bar cervecero del mundo en 2010. Sabemos que para muchos Ratebeer no es más que un punto de referencia pero también es cierto que a más de uno le gustaría poder colgar un galardón así en su tienda y/o bar.

El bar se encuentra en el barrio del Trastevere, exactamente en Via Benedetta 25,  y lo primero que destaca al entrar es lo pequeñajo del lugar, uno espera algo más jejeje, pero ya se sabe el tamaño no lo es todo… Además hay una pequeña sala al fondo así que el tamaño al final resulta aceptable.

Grifos Ma che Siete Vinuti a FaNada más entrar encuentras la barra con 10 grifos, cada uno rotulado a mano con la cerveza que tiene, en su mayoría cervezas artesanas italianas. El precio de la birra es de 4€ media pinta y 6€ la pinta. La verdad es que nos pareció un precio muy aceptable sobre todo teniendo en cuenta que Roma es bastante  cara.

Además de los grifos destacan algunas birrotas Americanas (DogFish) y Belgas (De Dolle, Struise, Cantillon) que tienen en neveras tras la barra. Uno entiende porque se le ha galardonado tanto cuando entra a horas fuera de futbol y se percata de que el tema de conversación es la cerveza, como pudimos comprobar en una pequeña charla con Manuelle, el regente del bar, y una tertuliana que al oírnos hablar del blog se interesó por la evolución cervecera en España.Neveras Ma Che Siete Venuti a Fa

 

Un corto pasillo lleva a una sala más tranquila donde poder tomarte las birras sin la presión de la barra, por cierto, no dejéis de babear con la estantería del pasillo, sobre todo si sois coleccionistas, porque entre otras cosas tienen una hermosa Utopia de Samuel Adams.Ma Che Siete Vinuti a Fa

 

 

En cuanto a birras, ya que estabamos en Italia, nos decidimos primero por el Birrificio Italiano, tomando una Tipopils ( una pilsener de estilo alemán de 5,2 º, amarguita y rompiendo con el tópico del estilo) y una BiBock (una Bock de 6.2º) ambas en jarrita de pinta. Después nos dimos el gustazo y nos apretamos una 2Late de BrewFist, una Double IPA de 9.2 º, asombrosa, con un gran aroma en el que se apreciaba mucho el lúpulo (de hecho el olor terminaba recordando el de otra planta canabinacea…), y una 2Di Picche de Birrificio Menaresta, una Black IPA de 6.8º espectacular.

IPAS BrewFist y Menaresta

 

Dejamos este pedazo de local, porque no tiene otro nombre, para ir a cenar, recomendados por Manuelle, al Bir & Fud, que se encuentra justo en frente (Via Benedetta 23). Este local, además de ser del consorcio formado por Birra del Borgo, Ma Che Siete Venuti A Fà y Domus Birrae (tienda de cervezas de la cual hablaremos).

Bir & Fud

 

 

Es recomendable que se reserve, ya que se peta, pero tuvimos suerte y al ser solo dos nos hicieron un huequito muy amablemente. Un detalle muy de agradecer es que intentan asesorarte sobre qué cerveza tomar (si no lo tienes claro) te preguntan si la quieres amarga o no, de qué color, estilo… Tras tomar nuestra decisión y tener la mesa lista nos sentamos a cenar.

Bir&Fud RomaLo primero que veréis al entrar es una barra con 20 grifos, todos ellos con cervezas italianas a 5 € la pinta. La barra está dividida por un alambique de cobre del que salen dos tubos de cobre anchos de los que nacen los 20 grifos.

Bir&Fud RomaLa decoración simple pero con botellas de cerveza artesana italiana presente. Muy acogedor y aunque hay bastante gente hay sitio de sobra, y es bastante amplio.

 

Nos decidimos por tomarnos una My Antonia, Imperial Pils de 7.5º, acompañada de una pizza Capriciosa trifolata (había una gran variedad de platos pero en fin, era el primer día y queríamos pizza!). De postre nos recomendaron el helado de pistacho artesanal, que es brutal, en serio si vais a cenar, no os lo perdáis está realmente bueno.

 

En fin, este fue nuestro primer día cervecero en Roma, ah! Por si acaso, y aunque la cosa puede cambiar, justo al lado del Bir&Fud  y en frente del “Ma che Siete Venuti a Fà” hay otra cervecería llamada “Birreria Trilussa”, también nos dejamos caer por allí pero no tiene nada que ver con los dos otros bares. Un local bastante grande, en el que al entrar se veían unos cuantos grifos, pero para nuestra decepción las cervezas que tenían pinchadas eran bastante  más típicas (Moretti, Dab, Tennents, Grimbergen…), si buscáis cervezas artesanas podéis pasar de largo.

Bélgica 2012

A principios de este año nos dejamos caer de nuevo por Bélgica, la ruta fue similar a la que ya habíamos hecho anteriormente (Bruselas, Gante y Brujas y en esta ocasión en vez de ir a Amberes conocimos Lovaina).

Bélgica es un país con bastante encanto, y dadas las distancias entre las distintas ciudades, resulta muy cómodo para visitar (ya sea moviéndose en tren o en coche). Además de las hermosas ciudades para visitar que parecen sacadas de cuento (como en el caso de la conocida Brujas), es un país de visita obligada para los amantes de la cerveza, pues la cultura cervecera de este país es increíble. Cualquier pequeño bar en todas las ciudades ofrecerá una buena selección de cervezas y siempre cada cerveza acompañada de su vaso correspondiente, cosa que nos resulta muy curiosa.

Hemos de decir que no podemos llamar realmente a nuestro viaje un viaje cervecero, puesto que el motivo del mismo era hacer turismo y conocer las ciudades con nuestra familia, pero alguna pequeña escapadilla relacionada con el turismo cervecero si hicimos, así que de modo muy resumido os pasamos a comentar nuestro viaje con aquellos bares o sitios que visitamos y que puedan resultaros de interés.

La ruta que hicimos en esta ocasión fue la siguiente:

Día 1: Aeropuerto de llegada- Charleroi: Desde el aeropuerto alquilamos un coche y nos fuimos directamente a GanteCerveza Kwak

Gante, ciudad que ya habíamos visitado y que de sobra sabemos que merece la pena. Nos tomamos nuestras primeras cervezas en Gante acompañadas de los famosos mejillones de Bélgica. Desgraciadamente no pudimos visitar el bar «De Bulle Griet«, este bar es bastante típico. situado en la plaza del mercado Vrijdagmarkt, donde hay una estatua de Jacob van Artevelde, debe su fama no sólo a ofrecer 250 tipos de cerveza si no a servir la kwak más grande de Gante. Al pedir está super cerveza, y para evitar que los avispados se vayan con el vaso típico en el que se sirve la kwak (yarda), tienes que dejar como prenda un zapato! idea tan original que le ha valido a este local la fama necesaria para que su visita sea imprescindible al pasar por Gante.

De Gante nos fuimos a pasar la noche a Brujas, donde teníamos el hotel, y donde pasaríamos también el día y la noche siguientes. Dentro de Brujas, uno de los lugares que descubrimos (en lo que a cerveza se refiere), fue una pequeña tienda en la plaza del Burg, en el lateral que lleva a la plaza del Market. La tienda se llamaba «De Struise Brouwers Bruges Beer Shop» y no es la típica de souvenirs (que en el caso de Bélgica ofrecen un número muy, muy aceptable de cervezas), sino una tienda que ofrece los productos de la cervecera de mismo nombre (De Struisse), cabe destacar que bastantes de las cervezas que pueden comprarse en la tienda resultan difíciles de conseguir fuera de Bélgica. Además puedes tener una charla muy agradable con los dueños de la tienda, e incluso degustar alguna de las cervezas, pues en la propia tienda tienen 3 o 4 grifos para poder probar la cerveza. Una experiencia muy agradable, de la que nos volvimos con dos cervezas navideñas Tjseeses (2010 y 2011) que podéis ver en nuestra colección.

También en Brujas visitamos un par de cervecerías, entre las que cabe destacar «‘T Brugs Beertje«, no es un bar muy grande, pero si bastante agradable, ofrecen más de 200 cervezas, así que la elección se hace complicada. Es uno de los café-bares con más cervezas de todo Brujas.

Aprovechando que estábamos terminando la época navideña, nos decidimos por probar alguna de estas cervezas estacionales  la «Stille Nacht» con la que ya contamos en nuestra colección y de la cervecera Struise la «Ignis & Flamma», esta última dada la buena experiencia que tuvimos en la tienda «De Struise Brouwers Bruges Beer Shop» de la que hablábamos hace un rato.

Por último, también en Brujas estuvimos en un bar situado en una calle que da a la plaza del reloj, y que estaba justo al lado de nuestro hotel «koffieboontje», el bar estaba bastante bien, tranquilo y con sitio para sentarse. Tenía más de 100 cervezas entre las que elegir. Los camareros muy agradables, nos obsequiaron con una alfombrilla de Deliriums Tremens para poner los vasos.

Al día siguiente nos fuimos a Bruselas, en lo que a cerveza se refiere tenemos que destacar un par de cosillas de las que hicimos por la capital de este país.

Mención de honor se merece el ya famosísimo «Delirium Cafe«, que cuenta con el record Guiness al bar con más cervezas en su carta.. más de 2400!! Vamos que si en algunos de los sitios anteriores hemos comentado lo difícil de elegir una cerveza de la carta, en este sitio es completamente imposible, jeje. Ya habíamos estado en el Delirium el año pasado, pero estar en Bruselas y no pasarse por aquí es delito así que obviamente volvimos. Han actualizado el «menú» es decir ese libro/guía que tienen para pedir cervezas, y que como muchos sabéis puedes comprar en el bar por 5€, algunos lo considerarán abusivo, pero la verdad es que resulta curioso, y te puede servir como lista para ir adquiriendo más cervezas, en nuestro caso como habíamos comprado la edición 2010-2011, esta vez no adquirimos la nueva puesto que no parecía tener demasiadas diferencias. 

Al día siguiente organizamos una visita a la Brewery Cantillon, esta cervecera es de las pocas que quedan en Bruselas que sigue fabricando la cerveza de forma artesanal.

La visita nos resultó muy curiosa,  te permite conocer el proceso de elaboración, vas visitando las diferentes «salas» donde trituran el grano, enfrían la cerveza, guardan las barricas, almacenan el lúpulo, trigo y cebada… Creo que es imprescindible para aquellos a los que les guste este mundillo, además degustas dos de sus cervezas a la salida. Cabe destacar que esta cerveza es muy diferente a la que estamos acostumbrados, no es espumosa, y tiene un sabor muy similar al de la sidra. Para los coleccionistas, decir que comprar las cervezas en la Brasserie sale un poco más barata que en otras tiendas.

Y por la tarde , todavía en Bruselas, nos tomamos  una cervecita en el «Manneken Pis Cafe  Taverne» que como su nombre indica se encuentra  junto a tan emblemática fuente.

La decoración del  bar está muy bien, y el precio para estar donde se encuentra no era demasiado caro. En esta ocasión nos tomamos una Barbar y una Carolus, y nuestros compis de viaje  optaron por las más clásicas Orval

Mientras recorríamos Bruselas, encontramos varias tiendas de cervezas muy interesantes. En cada tienda de souvenirs, contabas con un gran número

de cervezas en venta. Realmente resultaba complicado no ir comprando una cerveza tras otra y mantener la cabeza fría pensando que teníamos un peso máximo en la maleta para la vuelta y que al ritmo que íbamos lo sobrepasaríamos con creces. Aun así, recomendamos no comprar en las tiendas de souvenirs y pasarse por alguna de las que hay más especificas de cervezas, como son por ejemplo «Beer Planet«, «The Beer Temple»… En concreto, la primera de estas tiendas, tiene página de internet desde la que podemos comprar un montón de cervezas.

Y para terminar nuestro viaje desde Bruselas cogimos un tren para pasar el día en Lovaina, que se encuentra muy cerquita, y tiene en la plaza un ayuntamiento digno de ver, pero bueno, no es el objetivo de esta página hablar de lo más turístico de nuestros viajes (si no este»artículo» se hubiera alargado muuucho más), sino de la parte cervecera de nuestro viaje… ¿Y qué tiene Lovaina digno de señalar en cuánto a esta parte se refiere? Pues para empezar la fábrica de Stella Artois, una de las cervezas más conocidas del país, sin embargo en esta ocasión no hicimos la visita de la fábrica.

Donde si que estuvimos fue en la cervecería «Domus«, nuestra guía indicaba que tenía fama por ser posiblemente la primera cervecería del país, si bien, esto no es seguro, de lo que no cabe duda es que pasarse por ahí merece la pena.

Si que es la única cervecera artesanal que hay en Lovaina, y la cerveza (que no se vende embotellada), va desde la «brasserie» directamente hasta la jarra a través de unas tuberías de cobre.  Tienen 3 tipos de cerveza artesanal, la rubia, la dorada y la negra, está última conocida como Nen Engel, solo se vende en invierno. Aunque estábamos en temporada, nos decantamos por la rubia y la ámbar  puesto que no somos muy devotos a la cerveza negra. Ambas estaban buenísimas, comimos ya en el propio bar, que es enorme, y la verdad es que por un precio bastante ajustado (para estar en Bélgica) nos pusimos la botas, la comida al igual que la cerveza estaba riquísima.

Y bueno, este fue más o menos nuestro viajecito, nos hemos dejado algunas cosas en el tintero, intentaremos actualizar un poco más la información del viaje, pero si alguien tiene alguna duda, sugerencia o pregunta que se ponga en contacto con nosotros, y estaremos encantados de ayudar (si podemos).